Vicente Gatica, de Bragado, y Javier Reynoso, de Rivadavia, fueron los únicos alcaldes que buscaban un nuevo mandato y se quedaron en la puerta. Además, Darío Golía recuperó Chacabuco para el peronismo.
En medio de un fuerte vendaval interno de escala nacional, un puñado de municipios bonaerenses sobrevivieron anoche al derrumbe electoral de Juntos por el Cambio, que se quedó sin ballotage presidencial y con un futuro teñido de incertidumbre.
En la Cuarta Sección Electoral, el retroceso de la coalición se tradujo en la pérdida de tres municipios: Bragado, Chacabuco y Rivadavia.
En territorio bragadense, el intendente Vicente Gatica salió rápidamente a explicar su derrota ante el peronista Sergio Barenghi en “el arrastre nacional” de los votos de Unión por la Patria, con Sergio Massa plantado en la segunda vuelta para llegar a la Casa Rosada y Axel Kicillof ratificado sin sobresaltos como gobernador bonaerense.
Sin embargo, la lectura del líder del partido Unidos por Bragado contrasta en parte con la pintura de los municipios linderos, en los que Juntos por el Cambio consiguió, en muchos casos, sostenerse en el poder.
Así, con los números provisorios sobre la mesa, Pablo Petrecca (PRO) logró la re-reelección en Junín, Franco Flexas (UCR) hizo lo propio en General Viamonte y Salvador Serenal (UCR) se afianzó en Lincoln. Además, Érica Revilla (UCR) ganó en General Arenales, Nahuel Mittelbach (UCR) se impuso en Florentino Ameghino y Gilberto Alegre triunfó en General Villegas.
Por otro lado, la levantada de Massa en Nación derramó hacia abajo y benefició a sus candidatos en la Cuarta: en General Pinto, “Freddy” Zavatarelli revirtió la dura derrota de las PASO del 13 de agosto y “Juanci” Martínez le arrebató el municipio de Rivadavia a Javier Reynoso, de Primero Rivadavia, apadrinado por el ex diputado nacional Sergio Buil.
Finalmente, en Chacabuco, el peronista Darío Golía fue contundente frente al radical Alejo Pérez, candidato elegido por el saliente intendente Víctor Aiola. Así, el mapa regional comenzó a cambiar su configuración definida en 2015 y el justicialismo se hizo con el control de tres comunas.